Creo mucho en compartir estos videos que me regaló el culebro, poco antes de morir. Sobretodo porque es justo rendirle un homenaje y no olvidar al protagonista de la verdadera irreverencia televisiva. Porque ser irreverente en estos tiempos, creo que es de lo más fácil Pero ser irreverente a principios de los ochenta, eso sí es meritorio. Gracias al diario nocturno por subir esto.
Creo mucho en compartir estos videos que me regaló el culebro, poco antes de morir. Sobretodo porque es justo rendirle un homenaje y no olvidar al protagonista de la verdadera irreverencia televisiva. Porque ser irreverente en estos tiempos, creo que es de lo más fácil Pero ser irreverente a principios de los ochenta, eso sí es meritorio. Gracias al diario nocturno por subir esto.