Textos

Cumpleaños con Alzheimer

Julieta, una señora mayor, le pide a su hijo ayuda para hacer una reunión con sus amigas. Su hijo, también mayor, le contesta:
– Cómo no, mamá, quedate tranquila, yo te arreglo todo.
– Arreglar, ¿qué?
– La fiesta, mamá.
– ¡Ah sí! ya me había olvidado…
Esa tarde el hijo llama a la madre a la cocina y le muestra un papel con instrucciones para atender a sus invitadas:
1- Servir té
2- Servir sándwiches
3- Servir más té
4- Servir postre
-Qué bueno hijo, dice la señora, ahora no tendré problemas.
Esa tarde llegan las «chicas» Julieta, buena anfitriona, las acomoda en la sala, se excusa y va a la cocina, allí lee: 1- servir té.
Y allí les lleva té a sus amigas, en una elegante mesita.
Al rato de conversar sobre sucesos de sus vidas, Julieta, nerviosa, va a la cocina y lee otra vez :
1- servir té, les sirve más té. Y así lo repite hasta cuando sus amigas se van.
Una de ellas le susurra a otra mientras salen del edificio:
– Chela, viste qué mala anfitriona es Julieta, ¡ni un té nos dio!
Chela, le responde:
– Julieta, ¿de qué Julieta me hablas?
Esa noche el hijo llega a casa y se asombra al ver sandwiches y postres intactos, le pregunta:
– Mamá, ¿qué pasó?
Julieta le responde:
– ¡Podrás creer, las estúpidas no vinieron!

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