Diario íntimo de un señora

-DÍA 1
Hoy celebramos el 25º aniversario de matrimonio.
Intentamos revivir nuestra Luna de miel, pero él no pudo… como siempre ha sido últimamente.

-DÍA 2
Hoy él me contó su gran secreto: está medio impotente, gran novedad, realmente piensa que yo no lo sabía, ja, ja, ja. dije entre mi .

-DÍA 3
Este matrimonio va mal… Toda mujer tiene sus necesidades… Hay una edad en que deseas hacerlo con ganas…

-DÍA 4
Estoy ansiosa… Leí en el periódico que hay una nueva droga en el mercado que puede resolver nuestro problema, se llama Viagra. El va a cambiar el Prozac que toma, por Viagra, con la esperanza que le levante algo más que el entusiasmo .

-DÍA 5
¡Una bendición del cielo!
Resultó mejor de lo que esperábamos.

-DÍA 6
¡La vida es maravillosa!. Ando por toda la casa feliz tarareando la canción «Por qué te vas, por qué me dejas»

-DÍA 7
¡Tengo que confesar que el Viagra ha sido muy bueno!. Deben de otorgar el Premio Nóbel al que lo inventó.
¡Nunca fui tan feliz!. Me siento como una mariposa libre por ese deseo ardiente.

-DÍA 8
Creo que el ha exagerado la dosis de Viagra en este fin de semana…comienzo a estar un poco dolorida en las partes bajas y la que te dije me arde también. Oh, ahí viene de nuevo, que cag&da…

-DÍA 9
No tengo tiempo para escribir… él me puede agarrar en cualquier momento, está afiebrado, lo veo colorado.

-DÍA 10
¡Ok, admito, estoy escondida!. ¡Ninguna mujer puede aguantar tanto!. ¿Qué voy a hacer? Estoy toda molida.

-DÍA 11
¡YA NO AGUANTO MÁS! ¡Es lo mismo que ir a la cama con un taladro de doble percusión Black & Decker! esos garantizados que vende su amigo. ¡Esta mañana me despertó debajo de la cama! Se está volviendo una ladilla…¡Carajo!

-DÍA 12
No sé qué hacer para calmarlo, dejé de maquillarme, de bañarme, de lavarme los dientes, pero a él no le importa, me persigue, me acosa.
¡Se convirtió en un peligro! Anda con la cosota siempre parada, es algo atroz.

-DÍA 13
Cada vez que cierro los ojos, me ataca de nuevo.
¡Vivo con un misil Scud! Ya no puedo ni caminar…

-DÍA 14
He hecho cualquier cantidad de cosas para que me deje en paz, pero nada sirve, hasta me vestí como una monja, pero fue peor, como una mujer policía y fue salvaje porque me lo hizo con venganza… ¡Socorro! ¡Qué tipo tan inaguantable! Es un psicópata sexual el hombre con quien me he casado.

-DÍA 15
Voy a terminar matándolo, tengo unos dolores infernales al sentarme. Debo ponerme de costado para soportarlo, y mis amigas me miran de reojo.

-DÍA 16
Hoy le sugerí que suspendiera el Viagra y volviera a tomar Prozac… ¡Casi me pega! mientras abusaba de mi.

-DÍA 17
Hoy puse las pastillas de Prozac en la caja del Viagra (por si acaso te aviso que son casi iguales) pero parece que no le hace efecto… Tengo que dejar de escribir ¡Ahí viene otra vez ese animal de mie&da.

-DÍA 18

¡El Prozac comenzó finalmente a hacer efecto! Hay paz, qué felicidad… mi marido pasa ahora el día entero sentado frente al televisor, con el control remoto en la mano, mirando su football de mie&da, y preguntando qué vamos a cenar hoy mientras bebe su whiskicito de siempre con bastante hielo.

¡Ah, qué vida tan tranquila y maravillosa…qué buena es la normalidad!