En la Sala de Cirugía
Si te están operando, la anestesia aún no te ha hecho efecto y escuchas frases similares a las siguientes te debes preocupar o encomendar para que todo salga bien (si es que no puedes salir corriendo):
– Acepta este sacrificio… ¡oh señor de la oscuridad!
– Oigan, si este es el hígado… eso otro ¿qué es? 
– Enfermera… páseme esa… eh, ¿cómo se llama ese aparato?
– Uy se me paso un poco,  saben si alguien sobrevivió a 500 mililitros de esto antes?
– ¡De nuevo un apagón!
– ¡Todo el mundo quieto,  perdí mis lentes de contacto!
– ¿Pueden hacer que esa cosa deje de latir?  Me hace perder la concentración.
– ¿Cómo así? ¿este paciente no era el del cambio de sexo?
– No te preocupes, creo que esta bien afilado.
– ¡Fuego fuego,  todo el mundo afuera!
– Y ahora ¿qué hacemos?  La pagina 47 del manual no está.
– Dale un poco mas de anestesia, así duerme otro rato y vemos como se hace esto.
– La rodilla a operar era la otra.
-Que guayabo tengo, llevo dos noches sin dormir.
