Gato mas grande del mundo se come a su dueño

VIEJA YORK – Michín, el famoso gato mas gordo del mundo, fué puesto a órdenes de la policía de Vieja York luego de comerse a John Stevenson, su dueño de tan solo 60 años de edad.

El felino de 125 kilos se alimentaba con canguros, ya que los ratones no le calzaban ni una muela.

El incidente se dió luego de varias discusiones entre Michín y su dueño, que insistía en ponerlo a dieta. El gato ya lo había amenazado en varias oportunidades, pero el bolsillo del pobre John ya no daba más. Según relata uno de sus vecinos, casi todos los días el gato le reclamaba más y más alimento, y le tiraba el plato por la cabeza cuando no le gustaba lo que le servía su dueño.

La historia de Michín es bastante sorprendente. John Stevenson lo encontró en un safari por el África, cuando tenía tres meses de nacido (el gato, no John). A esa corta edad el gato peleaba cuerpo a cuerpo con leones de mayor tamaño. John se enamoró inmediatamente del animal y lo abrazó tiernamente.

El gato lo rasguñó tanto que tuvieron que llevar a John en varias ambulancias para poder armarlo nuevamente en Johanesburgo. Sin embargo, el bruto de John lo llevó a vivir con él en Vieja York. El animal duplicaba su tamaño cada dos meses, y los ahorros de la familia Stevenson disminuían de forma inversamente proporcional.

«John pensaba entrenarlo para las peleas de gatos, pero debido a su obesidad no le ganaba ni a un gato hidráulico». Comenta el vecino. ¿Pero, como pudo un gato tan pesado ganarle a su jovial dueño en plena flor de la adolescencia? Según el agente de la policía Pietro Califato, el felino gato aprovechó a que su dueño se durmiera para sentársele enla cara y matarlo de asfixia. Luego simplemente se lo comió.

La sociedad defensora de gatos, como siempre, se adelantó a defender al asesino, diciendo que el imprudente había sido su dueño al llevarse a su casa a un gato montés. (Que ignorantes, si ya se sabía que era selvés, pues vino de la selva y no del monte).

«Muchas personas cometen el grave error de llevarse a su casa animales salvajes pensando que son mascotas». El que terminó de masacota fué el pobre John, del que no quedaron ni los zapatos. «En Vieja York hay leones, cocodrilos y hasta elefantes en las casas de los ciudadanos, que los tratan como si fueran perros».

¿Pero, que culpa tiene John, si el bicho era realmente un gato, no un león ni nada parecido? La abogada gatuna alega que seguramente Michín fué criado por los tigres, por lo que el gato realmente creía que era uno de ellos. También dice que el pobre estaba sometido a demasiado stress y a los maltratos de su dueño. De momento, se espera el desarrollo del juicio. Por su parte, los abogados acusadores no se dejan meter gato por tigre, y piden la cadena perpetua para Michín, ojalá bien corta y con candado para que no se coma a nadie.

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